Monasterio Viejo de San Juan de la Peña - Huesca - Aragón 🇪🇸

SAN JUAN de la PEÑA - BOTAYA

 El Monasterio Viejo de San Juan de la Peña es uno de los conjuntos románicos más singulares e impresionantes de la península ibérica. Está situado en un escarpado paraje del Pirineo aragonés, en la Jacetania de Huesca, literalmente encajado bajo una gran roca que lo protege y lo envuelve, en una simbiosis perfecta entre arquitectura y naturaleza. Su emplazamiento, oculto y protegido por la roca, le confiere un carácter casi legendario y lo ha vinculado tradicionalmente con la resistencia cristiana durante la Reconquista.

La fundación del monasterio se remonta al siglo X, aunque la construcción del conjunto románico actual se inició en el siglo XI, en tiempos del rey Sancho el Mayor de Navarra. La advocación original fue a San Juan Bautista. La iglesia rupestre del monasterio es una de sus características más distintivas: excavada parcialmente en la roca viva, tiene planta basilical de una sola nave con ábside semicircular, y en ella se celebraban los oficios litúrgicos de la comunidad benedictina. Su interior, austero y de gran espiritualidad, se complementa con una cripta y una capilla dedicada a San Voto y San Félix, eremitas legendarios vinculados a la fundación del cenobio.

Uno de los elementos más notables del Monasterio Viejo es su claustro románico, construido en el siglo XII, adosado al muro de la roca y abierto hacia el valle. Los capiteles que decoran las columnas del claustro son de una calidad escultórica excepcional. Representan escenas del Antiguo y Nuevo Testamento, así como motivos vegetales, animales y figuras simbólicas, constituyendo una de las mejores muestras del románico escultórico peninsular. El maestro que los labró, de influencia jaquesa y lombarda, dejó obras de gran expresividad narrativa. Entre los capiteles más destacados figuran los de la Creación de Adán y Eva, el Sueño de los Reyes Magos, o el de Daniel en el foso de los leones.

El monasterio también fue panteón real del Reino de Aragón. En él fueron enterrados los reyes Ramiro I, Sancho Ramírez y Pedro I, así como otras personalidades de la nobleza aragonesa. Sus tumbas se alojaban en un arcosolio junto al muro de la iglesia, cubiertas con losas esculpidas con inscripciones y símbolos. Este hecho consolidó a San Juan de la Peña como centro espiritual del joven reino aragonés, y durante siglos gozó de privilegios y donaciones reales.

El Monasterio Viejo sufrió graves daños en 1675 a causa de un incendio, lo que llevó a la construcción del Monasterio Nuevo en un lugar más accesible, aunque se mantuvo la veneración por el recinto original, que fue objeto de restauraciones y conservación. En la actualidad, el monasterio forma parte del Parque Cultural de San Juan de la Peña y Monte Oroel, y es un hito fundamental del románico aragonés y de la historia del Reino de Aragón. Declarado Monumento Nacional en 1889, sigue siendo un lugar de gran simbolismo histórico, artístico y religioso y que conocemos con el Vídeo del Canal de YouTube.

Y más fotografías de este interesante Monasterio.













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